Conforme el hombre fue
sedentarizándose fue domesticando a los diferentes animales que le fueron
útiles y necesarios para su supervivencia.
Ganado por cuestiones
alimentarias, perros por cuestiones de seguridad y defensa.
La domesticación del gato
comenzaría posiblemente con la aparición de la agricultura.
Al gato le tocó ser domesticado
en torno al 7500-7000 a .C.
y en un principio atendería al cuidado del cereal almacenado. Los graneros
atraerían a los roedores y éstos a los gatos, sus depredadores naturales.
El gato ha conocido de la mano de
la estrecha relación que mantiene con el hombre distintas épocas con distintos
tratamientos.
Se le adoraba en el Antiguo
Egipto, se le demonizó durante la Edad Media al punto de casi exterminarles en
Europa y sufrir la peste que diezmo la población del continente (s.XIV), se les
intentó devolver su dignidad en época de Napoleón y a día de hoy en el primer
mundo hemos humanizado en buena medida el trato que les dispensamos cuando de
gatos domésticos se trata.
Las colonias urbanas son otros
López.
En el caso de Cartagena, una
ciudad que hunde sus raíces históricas en la leyenda y de la que tenemos por
firme el 229 a .C.
como fecha en la que nace como Qart-Hadash, también hay una historia que contar
atento a las vinculaciones de la urbe con sus colonias de gatos.
Los gatos son originarios de Asia
y se extenderían de oriente hacia occidente.
También se cree que todas las
razas de gatos domésticos proceden del
gato egipcio.
Pero si a los egipcios se les
atribuye el mérito de haber domesticado a los gatos, es a los fenicios y a los
romanos a quienes debemos su difusión por Europa, existiendo a día de hoy
importantes lagunas sobre la época en que tuvo lugar la misma.
Se cree que los primeros fueron
los fenicios que pese a que las leyes egipcias prohibían sacar del país los
gatos sagrados, los marinos fenicios se los llevaban de contrabando y eran
vendidos al igual que otros tesoros de Oriente, por lo que ya en la antigüedad
se encontraban a lo largo de toda la costa mediterránea.
Durante la Edad Media los gatos
eran odiados y temidos. Debido a sus hábitos nocturnos se creía que tenían
trato con el diablo. Esta asociación del gato con la brujería es debida en
buena parte a la iglesia, que de una parte demonizaba a los animales y de otra
les siguió usando en conventos y monasterios para acabar con los roedores y
preservar códices y otros documentos.
S.VII a.C.
Si en las costas de lo que hoy es
Mazarrón aparecieron en 1988 y 1998 respectivamente los restos de dos pecios
fenicios datados en el s.VII a.C. que nos indican una navegación de cabotaje en
la que partiendo de una nave nodriza mayor, estas pequeñas embarcaciones
navegarían junto a la costa adquiriendo a las poblaciones nativas minerales de
plomo (por los restos hallados en el Mazarrón II), fenicios y
gatos, ya les tenemos en la zona.
Si las embarcaciones están realizadas con
maderas, con cuadernas de higuera, tracas de pino formando el casco, fibras
vegetales para calafatear las juntas y otras, ello nos permite entender porque
los navegantes fenicios llevaban siempre consigo gatos. Si había ratas en los barcos estaban perdidos.
¿Se haría entrega en aquel momento de animales
como signo de agradecimiento a las poblaciones nativas?, ¿Se les vendería como
animales exóticos?.
Si está constatado que en las Islas
Británicas fueron los comerciantes fenicios los que introdujeron al gato,
intercambiándolo por el estaño de las minas de Cornualles, ¿ocurrió algo parecido en las zonas mineras
de lo que hoy conocemos como Mazarrón y Sierra Minera de Cartagena La Unión,
pero a cambio del plomo?
¿Habría establecido, como mas
tarde atestiguan los restos arqueológicos, emplazamientos comerciales puros y
duros con púnicos asentados en nuestras costas?, si es así, ¿con ellos convivirían
sus animales?.
Gatos en la costa en torno al
siglo VII a.C., ¿sí?, ¿no?, posiblemente no lo sabremos con certeza nunca.
Restos del Mazarrón 1 visitables
en el Museo Nacional de Arqueología Subacuática (ARQUA).
S. V a.C.-II a.C.
En los Nietos hay un yacimiento ibérico importantísimo que es El Escorial, yacimiento que nos permite situar un enclave
comercial desde el s. V a.C. hasta el II a.C. en el que conviviría la población ibérica primero con comerciales griegos y mas tarde con púnicos.
En cuanto a la relación de los
gatos y los griegos cuenta la leyenda que los egipcios rechazaban las
peticiones apremiantes de los griegos para comerciar con los gatos, a los que
veneraban como a dioses. Los griegos decidieron entonces robar los gatos.
Cogieron al menos seis parejas y las llevaron a Grecia. Algunos meses después
nacieron las primeras camadas, y algunos años después, los criadores pudieron
vender gatos a los Romanos, a los Galos y a los celtas. La especie se extendió
poco a poco por todos los países mediterráneos. En Grecia, antes de la llegada
del gato, la garduña, la comadreja y la mofeta se ocupaban de desratizar y
proteger las cosechas. La acogida del gato fue más bien moderada. Aunque no los
adoraban como los egipcios, los griegos adoptaron al animal, reconociendo su
don como cazador, pero reconociendo también que era más agradable para la
convivencia, ya que era más bonito, refinado, dócil y limpio que las mofetas y
las garduñas. El gato se usaba a veces como animal de compañía, aunque los
griegos preferían al perro. El gato era en principio un juguete, un regalo caro
traído de Egipto para ofrecerlo a las cortesanas.
Sea como fuere, ¿los gatos llegan
al poblado como un presente en el siglo V a.C. o les traen los púnicos en torno
al III?
Restos visibles en el Museo
arqueológico de Cartagena.
POBLADO IBÉRICO
DE LA LOMA DEL ESCORIAL, LOS NIETOS
(CARTAGENA)
….
Se ha podido documentar la existencia
de tres fases de habitación datable entre el s. V a.C. y los primeros
años del s. II a.C.; su fecha de abandono debe relacionarse con el
afianzamiento
del control romano de la zona. En la Fase II, fechable dentro
de la primera mitad del s. IV a.C. se han podido excavar dos habitaciones
de planta cuadrangular que conservaban 80 cm . de alzado. Se
documenta en ambas una destrucción a mediados de este siglo, conservando
las habitaciones sus ajuares domésticos completos. En el interior
de la habitación A se localizó un conjunto con ocho kráteras áticas de
figuras rojas con escenas dionisíacas, religiosas y mitológicas. Es el más
importante lote de este tipo localizado en el interior de un poblado
ibérico;
junto con las kráteras aparecieron numerosas ánforas ibéricas y de
importación (áreas del Egeo, Ibiza, Estrecho y Cartago) junto a vajilla
ibérica pintada. La ubicación costera del yacimiento y su proximidad a
la Sierra Minera de La Unión le confieren un carácter eminentemente
comercial abierto al contacto con agentes coloniales.
…….
En cuanto a las razones del origen del poblamiento en
Los Nietos, pensamos que se relaciona con el inicio de la
explotación de los recursos mineros de la Sierra Minera de La
Unión. Hay que destacar que Los Nietos se encuentra en el
punto del litoral del Mar Menor con acceso más próximo y
fácil a esta sierra, y además está junto a la desembocadura de
la rambla Carrasquilla, excelente vía de comunicación terrestre
entre los principales yacimientos mineros y el poblado, la
cual penetra siete kilómetros en la Sierra. Este afán por
comunicar la sierra con la costa se explica por la necesidad
de comercializar por vía marítima la producción minera,
comercio en el que debían estar implicados desde el mismo
origen los agentes coloniales responsables, a nuestro juicio,
de la ubicación y de la función principal del poblado
E. Diehl, ante la calidad y antigüedad de los materiales
de importación áticos hallados en esta primera excavación,
consideró posible que en La Loma del Escorial estuviera radicada
una factoría comercial griega, con presencia de elementos
griegos.
CONSIDERACIONES FINALES
La campaña de excavaciones de 1990 en el poblado de La
Loma del Escorial ha revelado la existencia de al menos tres
fases constructivas sucesivas que se pueden relacionar con los
hallazgos realizados en la primera intervención de 1962 por P.
San Martín. Los datos sobre la Fase inicial del poblado siguen
siendo muy escasos, pero se confirma su actividad al menos
desde el s. V a.C., con una importante remodelación que
podríamos datar en los años finales de este siglo. Ha aportado
mayor información referente a la llamada Fase II, donde se
documenta un nivel de destrucción a mediados del s.IV a.C. en
los dos departamentos excavados; por otra parte cabe reseñar
la existencia de una gran cantidad de importaciones cerámicas
y la variedad de los centros productores: su acumulación en
una sola estancia permite suponer que Los Nietos funcionó
como un importante centro redistribuidor de mercancías, hacia
el interior de la región, pero también debió servir como punto
de escala de la navegación; todo ello conlleva unas relaciones
muy estrechas entre los habitantes del poblado y los comerciantes
coloniales que debieron tener una presencia muy asidua
en el poblado (Barceló 1987-88, 173). Por otra parte la presencia
de litergirio (óxido de plomo residual del proceso de
copelación de la plata) en el departamento B demuestra la
existencia de esta actividad metalúrgica al menos desde mediados
del s.IV a.C. y que sin duda debió constituir uno principales
de los acicates comerciales en este periodo.
En el s.III a.C. en la orientación comercial se hace más
patente el predominio púnico; entre las importaciones destaca
un importante grupo de ánforas ibicencas (PE 15, 16, 23
y 24) ánforas del área del Estrecho derivadas de la Mañá-Pascual
A-4, ánforas Ribera G, ánforas cilíndricas del Mediterráneo
Central Mañá D, que cubren toda la centuria sin solución
de continuidad; en la vajilla de barniz negro sobre todo
predominan los productos del Taller de Rosas y las imitaciones
ibicencas, y en el momento final la Campaniense A
(GªCano e.p.). Es muy destacable el papel que parece haber
jugado Ibiza como agente intermediario a lo largo de esta
última fase. El contexto cerámico es paralelizable con los
niveles prerromanos de la ciudad de Cartagena, en el
periodo Bárquida. La subordinación al poder cartaginés
supondrá que tras la conquista de Cartagena, la reorganización
del territorio por el nuevo poder romano supuso la
desaparición del poblado en los años finales del s.III a.C. o
en los iniciales del s. II a.C. y su población diseminada en las
nuevas explotaciones (Diehl et alii 1964; Ruiz 1995, 153-182).
S.III
a.C.
(Carthago)
Cartagena nace como Kart Hadash
en el 229 a .C.
¿Los gatos que vienen con ellos
en sus embarcaciones se quedan en la ciudad ?
(Roma)
En el 209 a .C. la ciudad pasa a
manos de los romanos y recibe el nombre de Cartago Nova.
La antigua Roma acogió al gato
como
animal de compañía y como cazador de ratas. Al principio, sólo las familias
romanas ricas tenían gato, pero ya que se trata de un animal prolífico, todos
los romanos pudieron tener uno poco después. El pequeño felino era
especialmente apreciado por los soldados romanos, que lo llevaban con ellos en
sus campañas. Sin embargo, éstos últimos dejaron a alguno de sus gatos por el
camino, lo que ayudó a la propagación del animal por toda la geografía imperial.
El felino poseía incluso su
propia diosa, Plinio el Viejo describió al gato, en el siglo I a.C. en su Historia
natural, como protector de los graneros, apreciado por su belleza, su amistad y
su independencia, como demuestran los frescos y los mosaicos que lo representan
como un símbolo de libertad.
El gato estaba de moda en la
sociedad romana, y un gran número de lugares que llevaban el nombre de gato son
resultado de conquistas imperiales.
En 392, después de que el culto
de Bastet y el de Diana se fusionaran, el emperador cristiano Teodosio prohibió
los cultos paganos. Los gatos sufrieron la desconfianza de los humanos, que
duraría varios siglos. En el siglo V, el gato se establece en toda Europa. Las
invasiones bárbaras traen la peste, oficializando el estatus del gato como
cazador de ratones.
Si está demostrada la vinculación
de la Colonia con Roma a través de las concesiones de las minas a familias del
Lacio que explotarían los yacimientos de galena argentífera (plomo y plata) de
la sierra y las vinculaciones con la familia imperial (Cayo y Lucio, nietos de
Augusto en el Teatro), ¿los gatos llegan progresivamente
con estas familias principales a la ciudad o estaban establecidos antes?.
Sea como fuere los gatos están en
Cartagena mínimo desde el s.III aC.
Siendo los gatos de las colonias
actuales del centro los descendientes de los gatos de los moradores del
Molinete que debiendo abandonar el mismo en los años 70, en unos casos se
llevan consigo sus animales domésticos y en otros no será posible y no teniendo forma
de alimentarse arriba irán bajando por los callejones que daban a San Fernando,
a San Vicente, a Balcones Azules y a Morería de tal forma que serán aquellos
primeros vecinos y comerciantes los que les atiendan.
La cronología de los gatos en CT
es, por tanto, la siguiente:
S VII a.C. fenicios
s. V a. C griegos
s III a C
cartaginenses
s. III a. C romanos.
Sea cual fuere la antigüedad de
los animales vinculados a nuestra ciudad, una ojeada a la historia de la misma
da como resultado la absoluta certeza de que son parte de Cartagena desde los albores de su historia.
Ana R.
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